Este texto es para invitarlos a la reflexión, es mi opinión y esta abierta a discusion:
Otra vez es 15 de septiembre, esta noche la mayoría de los mexicanos se embriagaran, cantaran, gritaran, bailaran… aunque una gran parte de ellos no tenga idea del porque, así como paso antier el 13 de septiembre y muchísima gente no sabe nada al respecto, cuando en la misma fecha del año 1847 los cadetes del Heroico Colegio Militar de Chapultepec pelearon hasta dar su último aliento para defender nuestra bandera, aun cuando era imposible ganar.
Cuando se inicio la independencia de México del yugo español, quiero pensar que esas personas con iniciativa y valor, que se atrevieron a revelarse contra la opresión, no se imaginaban a nuestro país como lo es ahora. Aquellos ideales de libertad y esperanza cobraron forma y se convirtieron en algo tan poderoso, que rompió las cadenas que nos ataban, que nos hacían servir.
Hoy en día, en este país como en muchos otros, la gente cree que es libre, nos inculcan esa ilusión desde pequeños; la libertad es nuestro derecho constitucional, es por lo que pelearon hace 201 años, es por lo que han muerto muchísimas personas, para que pudiéramos ser libres… ¿Pero, lo somos?
Ser libre es actuar conforme nuestras convicciones, es tener el poder de elegir qué carrera estudiar, con quien casarnos, tener hijos o no, vivir decentemente, ser delincuente… pero a veces la gente se olvida de leer las letras pequeñas: “Ser responsable de las consecuencias que esos actos nos causen, buenas o malas”. En teoría no es un concepto difícil, “se lee fácil”, pero que pasa cuando lo llevamos a la práctica?: “No choque, me chocaron”, “Tu eres la que no se cuido, por eso te embarazaste”, “El maestro me reprobó”, “Lo hice porque todos lo hacen”… ¿Les suenan familiares estas frases? Las personas siempre buscan consuelo a su culpa buscando chivos expiatorios, ¿como podemos exigir si no nos hacemos cargo de las consecuencias de nuestros actos?
Otra vez es 15 de septiembre, y las cosas no han cambiado mucho que digamos: nos liberamos de nuestras cadenas, para esclavizar a otros con las mismas. Salimos de una monarquía para entrar a algo similar, porque nuestros gobernantes se sienten nuestros dueños; somos esclavos de nuestras propias decisiones, de las personas que elegimos para representarnos. Y eso si es que es verdad que la democracia existe, porque si no, estamos más jodidos de lo que se cree.
Hoy en la noche, si eres de las personas que va a ir a divertirse, reflexiona un momento: ¿Qué vas a celebrar?, ¿Qué cada vez hay más delincuencia, mas muertos, más extorsiones, mas fraudes por teléfono, mas secuestros, que nuestros gobernantes y representantes son cada vez mas rateros y abusivos?. Si vas a festejar, que sea para empezar a ser un mejor ciudadano.
Vivimos en un gran país, un país que ha tenido que pasar por mucho sufrimiento para llegar a ser lo que somos, tenemos la bandera más hermosa del mundo (elegida por votación internacional) y no solo eso, nuestra bandera tiene su significado: Verde por esperanza, Blanco por unidad y Rojo es por la sangre de nuestros héroes nacionales; el escudo es por la leyenda azteca de la fundación de Tenochtitlán (hoy Cd. De México). Nuestro país tiene muchísimas riquezas, tenemos el centro minero más antiguo de América en Taxco, Guerrero; estamos entre los primeros países en biodiversidad, somos el país con más reptiles en el mundo; tenemos una gastronomía exquisitamente diversa, reconocida a nivel mundial… Como dice Alex Lora: “nuestro país tiene la forma del cuerno de la abundancia”.
Nosotros somos más grandes que los problemas del país, somos más grandes que todos los políticos corruptos, que los delincuentes, que todas esas personas que sangran al país para llenarse los bolsillos. Somos mexicanos, somos guerreros por naturaleza, somos guerreros desde nuestros orígenes, no debemos dejar de luchar, no debemos rendirnos; recordemos todos los días de nuestra vida los colores verde, blanco y rojo, esperanza, unidad y a los héroes que dieron sus vidas para que pudiéramos vivir libres y con dignidad. Si vamos a festejar hoy, que sea porque empezaremos hoy a ser el país que soñaron aquellos libertadores, aquellos que se decidieron, actuaron y lograron su y nuestra libertad.
Otra vez es 15 de septiembre, esta noche la mayoría de los mexicanos se embriagaran, cantaran, gritaran, bailaran… aunque una gran parte de ellos no tenga idea del porque, así como paso antier el 13 de septiembre y muchísima gente no sabe nada al respecto, cuando en la misma fecha del año 1847 los cadetes del Heroico Colegio Militar de Chapultepec pelearon hasta dar su último aliento para defender nuestra bandera, aun cuando era imposible ganar.
Cuando se inicio la independencia de México del yugo español, quiero pensar que esas personas con iniciativa y valor, que se atrevieron a revelarse contra la opresión, no se imaginaban a nuestro país como lo es ahora. Aquellos ideales de libertad y esperanza cobraron forma y se convirtieron en algo tan poderoso, que rompió las cadenas que nos ataban, que nos hacían servir.
Hoy en día, en este país como en muchos otros, la gente cree que es libre, nos inculcan esa ilusión desde pequeños; la libertad es nuestro derecho constitucional, es por lo que pelearon hace 201 años, es por lo que han muerto muchísimas personas, para que pudiéramos ser libres… ¿Pero, lo somos?
Ser libre es actuar conforme nuestras convicciones, es tener el poder de elegir qué carrera estudiar, con quien casarnos, tener hijos o no, vivir decentemente, ser delincuente… pero a veces la gente se olvida de leer las letras pequeñas: “Ser responsable de las consecuencias que esos actos nos causen, buenas o malas”. En teoría no es un concepto difícil, “se lee fácil”, pero que pasa cuando lo llevamos a la práctica?: “No choque, me chocaron”, “Tu eres la que no se cuido, por eso te embarazaste”, “El maestro me reprobó”, “Lo hice porque todos lo hacen”… ¿Les suenan familiares estas frases? Las personas siempre buscan consuelo a su culpa buscando chivos expiatorios, ¿como podemos exigir si no nos hacemos cargo de las consecuencias de nuestros actos?
Otra vez es 15 de septiembre, y las cosas no han cambiado mucho que digamos: nos liberamos de nuestras cadenas, para esclavizar a otros con las mismas. Salimos de una monarquía para entrar a algo similar, porque nuestros gobernantes se sienten nuestros dueños; somos esclavos de nuestras propias decisiones, de las personas que elegimos para representarnos. Y eso si es que es verdad que la democracia existe, porque si no, estamos más jodidos de lo que se cree.
Hoy en la noche, si eres de las personas que va a ir a divertirse, reflexiona un momento: ¿Qué vas a celebrar?, ¿Qué cada vez hay más delincuencia, mas muertos, más extorsiones, mas fraudes por teléfono, mas secuestros, que nuestros gobernantes y representantes son cada vez mas rateros y abusivos?. Si vas a festejar, que sea para empezar a ser un mejor ciudadano.
Vivimos en un gran país, un país que ha tenido que pasar por mucho sufrimiento para llegar a ser lo que somos, tenemos la bandera más hermosa del mundo (elegida por votación internacional) y no solo eso, nuestra bandera tiene su significado: Verde por esperanza, Blanco por unidad y Rojo es por la sangre de nuestros héroes nacionales; el escudo es por la leyenda azteca de la fundación de Tenochtitlán (hoy Cd. De México). Nuestro país tiene muchísimas riquezas, tenemos el centro minero más antiguo de América en Taxco, Guerrero; estamos entre los primeros países en biodiversidad, somos el país con más reptiles en el mundo; tenemos una gastronomía exquisitamente diversa, reconocida a nivel mundial… Como dice Alex Lora: “nuestro país tiene la forma del cuerno de la abundancia”.
Nosotros somos más grandes que los problemas del país, somos más grandes que todos los políticos corruptos, que los delincuentes, que todas esas personas que sangran al país para llenarse los bolsillos. Somos mexicanos, somos guerreros por naturaleza, somos guerreros desde nuestros orígenes, no debemos dejar de luchar, no debemos rendirnos; recordemos todos los días de nuestra vida los colores verde, blanco y rojo, esperanza, unidad y a los héroes que dieron sus vidas para que pudiéramos vivir libres y con dignidad. Si vamos a festejar hoy, que sea porque empezaremos hoy a ser el país que soñaron aquellos libertadores, aquellos que se decidieron, actuaron y lograron su y nuestra libertad.
